¿Dolor o desajustes durante la menstruación? Analizamos las diferentes patologías

La menstruación puede ocasionar algunos trastornos en la mujer caracterizados por dolor o alguna anomalía. Veamos los más comunes:

Dismenorrea

Puede presentarse como consecuencia de otras enfermedades, como endometriosis, enfermedad pélvica inflamatoria o fibromas uterinos, o surgir desde el comienzo de la menstruación en la adolescencia. Este trastorno menstrual se caracteriza por fuertes dolores durante la menstruación. Las mujeres con dismenorrea experimentan contracciones uterinas anormales como resultado de un desequilibrio químico en el cuerpo (particularmente la prostaglandina y el ácido araquidónico, sustancias que se encargan de la contracción del útero).

Aunque todas las mujeres pueden sufrir este tipo de trastorno, las más propensas a sufrir la dismenorrea son las mujeres que fuman, las que beben alcohol durante el período menstrual, las mujeres con sobrepeso, y las que comenzaron a menstruar en edades tempranas (antes de los 11 años de edad).

Los principales síntomas son: cólicos y dolor en la parte inferior del abdomen, dolor lumbar, dolor irradiado hacia las piernas, náuseas, vómitos, diarrea, fatiga, dolor de cabeza.

Para diagnosticarla es preciso descartar primero otras afecciones más graves, como endometriosis, fibromas, pólipos o cualquier enfermedad del útero.

Las principales técnicas que se emplean para su diagnóstico son la ecografía, resonancia magnética, laparoscopia o histeroscopía.

Entre los posibles tratamientos constan algunos medicamentos que pueden ser recetados por su médico (entre los que se encuentran los anticonceptivos orales), cambios en la dieta, aplicación de calor en la zona, masajes…

Síndrome premenstrual

Puede ser leve o más severo, en cada mujer se manifiesta de una manera. Es la patología más común, pues más del 80% de las mujeres lo experimentan. La causa principal son los cambios hormonales durante el ciclo menstrual.

Sus síntomas pueden darse una o dos semanas antes de la menstruación y desaparecen cuando se inicia. Los más comunes son: Acné; pechos inflamados o sensibles; cansancio; dificultad para dormir; malestar estomacal; distensión abdominal; estreñimiento o diarrea; dolor de cabeza; dolor de espalda; dolor en las articulaciones o músculos; problemas con la concentración o memoria; tensión, irritabilidad y cambios de humor.

La medicación, los anticonceptivos hormonales, cambios en la dieta (evite los siguientes alimentos: la sal, los alimentos con azúcar, cafeína y alcohol), ejercicio regular, el descanso y la relajación pueden ayudar a disminuir los síntomas.

Trastorno disfórico premenstrual

Es una forma severa del síndrome premenstrual. La serotonina puede jugar un papel en el trastorno disfórico premenstrual, añadiendo a los síntomas comunes episodios de depresión, ataques de pánico, ansiedad, fatiga, dolor articular.

Los síntomas se presentan durante la semana antes de la menstruación y desaparecen después de que comienza el sangrado.

De nuevo, los cambios en la dieta o las rutinas hacen mejorar estos síntomas.

Menorragia

Es un sangrado menstrual que dura más de 7 días o es muy abundante y que, debido a ello, puede causar anemia.

Sus síntomas pueden estar relacionados con anomalías en el útero, trastornos hormonales u otras enfermedades.

Se caracteriza por la presencia de coágulos, flujo menstrual muy abundante que nos hacen cambiar de compresa o tampón con bastante asiduidad, períodos menstruales largos (de más de 7 días), cansancia y dolor en la parte baja del estómago.

Dependiendo de la gravedad, el especialista podrá recetarle un tratamiento farmacológico, como anticonceptivos, antifibrinolíticos, suplementos…; o tratamientos quirúrgicos.

Amenorrea

Es la falta del período menstrual, que puede darse a través de la ausencia de menstruación en mujeres jóvenes que han llegado a los 16 años o la detención de esta por lo menos durante tres meses y descartando la posibilidad de embarazo. La amenorrea en sí no es una enfermedad, pero suele ser un síntoma de otra afección.

La mujer puede experimentar otros síntomas, como dolor de cabeza, cambios en la visión, pérdida de cabello, o exceso de vello facial.

Las principales causas responden a anomalías genéticas, trastornos alimenticios, estrés, enfermedades en los órganos reproductivos. El tratamiento dependerá de la causa de esta patología.